ONOFROFF, EL
MAGO QUE “CAUTIVÓ” A CHICLAYO
El mago Enrique Onofroff, llega al Perú (Lima) por primera vez
en el verano de 1898, venía precedido de
fama como hipnotizador; para luego volver en 1912 y por última vez en 1916.
(Solo se tiene referencias de sus visitas a Chiclayo en el Siglo XX).
Entre las anécdotas del tan afamado Onofroff que se suscitaron
en Lima podemos decir: Para su llegada en 1912 visitó a una autoridad política
que era incrédula sobre lo que de él se decía y el sugestionador lo hizo bailar
una marinera en su oficina bajo el poder de su mirada dominadora.
Para su visita a la capital en 1916 se presentó en el Teatro
Municipal en donde sugestionó a todo el público haciéndoles creer que había
llegado tarde a su actuación, luego les pidió que vieran su reloj y comprobaron
que era la hora exacta de la actuación.
Por otro lado, la sociedad de Lima le ofreció una comida en
el “Jardín de la Exposición”; al terminar el ágape, el mago pidió la cuenta,
todos reclamaron que era el invitado pero insistió y rompiendo un periódico en
pedazos, puso los papeles en una bandeja, a lo que el mesero vio dinero y fue a
caja y le trajo vuelto, fueron testigos los presentes.
Hasta existieron exageraciones que a pesar de serlas eran aceptadas
en todo Lima como lo fue el caso de su visita al anfiteatro de la Facultad de
Medicina en donde reunido con un grupo
de alumnos, estos empezaron a desconfiar de su poder y para convencerlos
Onofroff hizo levantarse a un cadáver y dar un paseo por la sala.
Era tanta su fama que hasta Abrahán Valdelomar le hace una
conversación – entrevista al “hombre que hace dormir” (Onofroff) preguntándole:
¿Qué pensaba sobre la muerte? A lo que el artista contestó: “Hija
de la vida. Somos pequeños cementerios ambulantes, estimado poeta. Células que
fenecen y que nacen a cada instante”.
Al preguntarle sobre la adivinación respondió: “Excúseme
usted. Tal vez ella se ajusta a los principios o leyes que desgraciadamente yo
ignoro. Lo que si puedo hacer es transmitir pensamientos (…)”.
También en ese año de 1916 hubo un sonado crimen en Lima, el
11 de marzo, los esposos Ibarra fueron asesinados por Alejandrino Montes, en
complicidad con su hermana Fabiana, quienes eran sirvientes en la casa del
acaudalado minero. (La Sra. Eloisa fue atacada en el baño de su casa por
Alejandrino quien la apuñaló en el vientre y al llegar su esposo lo asesinó con
una comba).
Onofroff visitó e interrogó al asesino hipnotizándolo y entre
otras le dijo: ¿Me oye usted Alejandrino.
Fue usted el asesino de los esposos Ibarra? Respondiéndole: “Si, señor, yo los
maté, por envidia a su riqueza”. ¿Qué esperaba de esa vileza? “Ser rico me
figuré, yo envidiaba a mi patrón, yo me quería igualar y cambiar de condición
para pasearme y mandar”.
¿PERO REALMENTE QUIEN FUE ONOFROFF?
Tenía origen italiano, según decía el mismo “Nací en Roma, en
la Legación de Suiza en la que mi padre era Secretario”. (1863/ década 1920) Sobre
su nombre, también es un misterio; para 1889 un periódico de Paris lo
identificaba como Enrico Onofri. Se hacía llamar Enrique Bally Onofroff, nombre
que modificaba según su conveniencia cambiándolo a Henry, Augusto o en otro
caso agregando una D a su apellido (D’Onofroff). Habiendo serias sospechas que
se llamaba Onofre y era Catalán.
Era alto, trigueño, de cabello crespo y mirada profunda;
vestía siempre frac donde lucía una condecoración.
La figura de Onofroff ha sido más difundida en artículos y
estudios en América que en Europa donde se había presentado en famosos lugares
como: el hotel Holborn Great Central Hall o el Royal Aquarium Theatre en
Westminter, el teatro Folies-Bergere de Barcelona, además los periódicos y
revistas de Berlin, Roma, San Petesburgo, Viena hablaban de él como un prestidigitador
e hipnotista de primera categoría.
Sobre su recorrido por América, solo se ha podido rastrear su
presencia en cinco países (México, Colombia, Argentina, Chile y Perú). Su paso
por México lo hace a comienzos de abril de 1900 recorriendo luego el país,
tanta fue la influencia en ese lugar que el periodista Abrahán Sánchez Arce
fundó un periódico de sátira y caricatura políticas bautizado “Onofroff”;
volviendo en 1917 y presentándose en el Teatro “Colón” en tres únicas funciones.
En Colombia solo se conoce estuvo en 1917 presentándose en
Bogotá, Medellín y otros lugares más, donde obtuvo brillantes triunfos como
hipnotizador y magnetizador. En Bogotá hizo uno de sus actos en las
instalaciones de la revista “El Gráfico” en donde encontró la fosforera de
metal escondida ex profesamente.
En Argentina, se sabe sólo llegó en 1895; y durante tres
meses tendría en vilo a la capital Argentina gracias a sus poderes telepáticos
e hipnóticos. Aquí también realizó un acto de mentalista en la oficina del
Secretario del Departamento de Higiene. Realizó igualmente un acto de lectura
de la mente en la casa del ex presidente de Argentina (1862-68) Bartolomé Mitre
en donde solo con la orden mental, Onofrof fue a la habitación privada, sacando
entre varias medallas, la que había pedido el Sr. Mitre ante el asombre de los
invitados.
A Chile llega en 1898 y en 1913 presentándose en Santiago,
Valparaíso y otras localidades donde el público lo aplaudió vigorosamente y se
impresionó con viveza con su espectáculo de transmisión de la voluntad, la
adivinación, la fascinación y la sugestión mental. En su debut en 1913 estuvo
entre la audiencia el Presidente de la República Ramón Barros Luco (1910-1915) quien asistió junto a su familia,
así como otras autoridades del ámbito político y científico. Entre los números
hubo actos de sugestión en donde la gente que se sometió a la prueba
experimentó: frío, calor, hambre y hartura, alegría y dolor, es decir todas las
sensaciones y emociones tan variadas; también desempeñaron los más raros
oficios, bailaron, espantaron mosquitos, apagaron incendios etc. Situaciones cómicas
que produjo en el público una hilaridad explosiva.
Su imagen también fue difundida a través de varios recursos
como lo fue en la poesía, el poeta Fernández Montalván escribió:
“Al rayo abrasador de su mirada / La ajena voluntad se ve
rendida, / Y pierde la conciencia hipnotisado / Las claras percepciones de la
vida.
Y ejerciendo el poder con que dominas, / Desplegando tus
raras aptitudes, / Como un ser mitológico caminas / En medio de asombradas
multitudes. (…)”.
En esta visita de 1913 fue protagonista de una campaña en su
contra por parte del periódico “El Diario Ilustrado”, antes de comenzar su espectáculo
es arrestado violentamente y llevado a la comisaría, interrogado por un Juez es
acusado de estafa porque tenían
testimonio de personas que son pagadas para hacer los trucos ante el público.
Lo cual es aceptado por Onofroff pero explica que eran personas contratadas por
ser proclives al hipnotismo y que nunca simulaban tal estado; saliendo libre
esa misma noche. La noticia causó sensación y el periódico “El Mercurio” lo
entrevista y Onofroff desea limpiar su nombre proponiendo visitar la redacción
del periódico y realizar un acto de hipnotismo la cual desarrolla en forma positiva, luego a un
joven funcionario con sus poderes hipnóticos lo hace bailar cueca, además le
ordena que al día siguiente vaya a su habitación de su hotel furioso y lo
abofetee por haberlo dejado en ridículo. Al día siguiente los periodistas de
“El Mercurio” observan y siguen al joven en espera de su reacción y se cumplió
la orden dada por Onofroff. Con esto se dio la derrota del periódico “El Diario
Ilustrado”. Días después hace otras demostraciones de sus poderes hipnóticos.
¿CUAL FUE LA ACTUACIÓN
DE ONOFROFF EN CHICLAYO?
Lo que nuestro poeta y escritor Nicanor de la Fuente “Nixa”
nos cuenta al respecto es:
“Hizo las pruebas que le dieron fama como aquella de iniciar
la función a la hora correcta, pero jugándole al público la mala pasada de que,
como había llegado tarde, ya no había función. La cita era para las 7 de la
noche. Les dijo: - Señoras y caballeros, respetable público, lo siento, pero
son las nueve de la noche….. Y en todos los relojes de bolsillo que sacaron los
caballeros, se vio efectivamente que eran las nueve, cuando solo eran las
siete.
Este era el primer número de espectáculo. Luego vendrían las
carteras, relojes y joyas, que hacía desaparecer y que él entregaba en el
escenario. Y sucedió el caso curioso que un chiclayano incrédulo, que en la
primera fila de la platea miraba y se sonreía, hablando y parándose y hasta
impertinente en su actitud. Entonces Onofroff lo invitó a subir al escenario. Era
Ezequiel Quiñones.
-
Usted no cree en lo que hago. ¿No cree en lo que ve?
-
No, señor, son trucos….
Y mirando al público, hizo ademán de su incredulidad,
riéndose.
Realizó algunas pruebas en su delante y nada más. Sonriendo,
“el hombre que hace dormir” como lo titulaban en las carteleras, le dijo: -
Usted va a correr mañana, a las diez de la mañana, en la plaza de Chiclayo. Y
dirigiéndose al público hizo la invitación:
-Señoras y caballeros, para mañana a las 10, os invito a
presenciar a este caballero correr en torno del parque…
-¡Pégale un balazo!, gritó uno de la cazuela, porque a
Quiñones lo conocían con el apodo de “Balazo”.
Al día siguiente en el parque, un enorme gentío fue testigo
de la llegada de don Ezequiel a cumplir corriendo en torno al parque.
-¿Cómo y por qué viniste? Le preguntamos.
-Yo no sé, yo no sé. Estaba en mi casa, cuando a las 10 algo
me impulsó a salir y ya vieron. Este hombre es el demonio andando suelto..”
(Se trataría de José Ezequiel Quiñones San Martín (Chiclayo
1894/Lima1967) quien para el acontecimiento contaba con 22 años).
En otro de sus escritos “Nixa” nos da a conocer que Onofroff,
murió trágicamente en México en 1924, (después del asesinato del presidente
Obregón) en una función en uno de los trucos de desaparición, topó con un
espectador que estaba ebrio al cual hizo desaparecer su reloj, acto después
este personaje le solicitó su prenda y sacando su revolver le disparó, siendo
trasladado al hospital donde falleció.
El periodista chiclayano José Arana Cuadra nos habla también
de Onofroff con una versión parecida, pero en lo que respecta al lugar de su
muerte, diferente:
“El 16 o 17 llegó a Chiclayo un famoso hipnotizador a nivel
mundial, que no ha vuelto a producir la humanidad uno igual, el famoso Onofroff,
creo que era ruso, un hipnotizador del ajo: Un episodio digno de este caso es
que en una función hipnotizó a 2 asistente, a un Sr. Cossio que era maestro de
albañilería y a Ezequiel Quiñones, les dio la orden de ir al día siguiente a
las tres de la tarde al parque y dar dos vueltas corriendo, la gente no creyó,
pero como no había otra cosa que hacer fueron al parque a esperarlos, cuando en
eso se presentan y principian a dar vueltas en el parque como locos. Fue
formidable, a Onofroff lo mataron en Chile”.
Por otro lado, en el periódico “La Abeja” de Chiclayo se
publicó una nota de prensa el 27 de octubre de 1912, pag.4 que decía:
“REVISTA TEATRAL ONOFROFF:
Con justa razón anunciamos en nuestro número anterior que el
público gozaría con las pruebas de Onofroff el incomparable y nunca visto en
Chiclayo.
Este acierto ha resultado eficacísimo, siendo la admiración
de todos los concurrentes a nuestro Teatro 2 de Mayo.
En las tres noches que ha trabajado Onofroff, lo hemos visto ejecutar
complicados fenómenos en la gestión de la voluntad, llevados a cabo con la
vigilancia de respetables caballeros, que en escena confeccionaban para
esconder entre el público, objetos que Onofroff vendado venía a sacarlos de los
bolsillos. En la transmisión del Pensamiento, es decir en lo que pensaba y
escribía el sujeto, no ha fallado, todo lo ha adivinado Onofroff y confirmado
el sujeto que pensaba y escribía.
Entre el Comité de Vigilancia, ha figurado un reputado médico
nuestro, el Dr. Razzeto, que ha palpado como todos los demás espectadores,
traspasar de extremo a extremo el brazo de un magnetizado con un alfiler de
acero del tamaño de 10 pulgadas, sin que al sacar dicha arma punzante haya
producido la hemorragia que venía mucho después por voluntad del magnetizador
para luego desaparecer y no quedar a menor huella ni el paciente haberse dado
cuenta de nada.
En el Magnetismo, Hipnotismo y Fascinación ejecuta en los
magnetizados muchísimos fenómenos todos diversos, los hace reír, cantar,
llorar, sentir calor a la vez que frío, carreras de caballos imaginarios, caza
de peces, picotazos de hormigas que los desespera hasta los extremos de que los
sujetos se sacan los zapatos y medias.
Estos y otros muchos experimentos realiza Onofroff y no se
crea que con personas analfabetas, no; entre todos los sugestionados figuran jóvenes
de nuestra alta clase social que voluntariamente suben en escena como lo hizo
en la función del jueves el periodista y poeta contemporáneo, nuestro amigo Sr.
José María Bazán Balcazar, que por voluntad de su magnetizador Onofroff,
improvisó una hermosa y bien recitada composición que el público lo ovacionó
largos instantes.
Para MAÑANA DOMINGO y a pedido del público dará este admirable
profesional su última función de despedida con una notable rebaja de precios al
alcance de las clases populares.
Este semanario obrero, desea al Sr. Enrique Onofroff un
Teatro lleno a la vez que coseche mayores triunfos en su arte y por donde pase
tenga fervientes admiradores”.
(Sobre el Dr. Oscar Razzeto, fue limeño que se graduó de
médico 1906, llegó a Chiclayo aproximadamente en 1910. Fue quien instaló el 1°
Equipo de Rayos X particular en Chiclayo. El Sr. José María Bazán Balcazar
(Chiclayo1887/1923) quien para este acontecimiento contaba con 23 años,
falleció en el Hospital de Las Mercedes de “hepatitis supurada” a los 36 años,
soltero).
Con esto podemos darnos cuenta el tipo de espectáculos que
llegaban a Chiclayo a inicios del siglo XX.
SE HA CONSULTADO:
-“Del Chiclayo que se fue”
de miguel Angel Diaz Torres (1993).
-“A Propósito” de Nixa
: “El demonio andando” (29-12-1990) y “La tragedia del mago” (06-01-1991)
diario “La industria” de Chiclayo.
-“Diccionario Teatral
del Perú” de Manuel Moncloa y Covarrubias (1905).
-“Lima-revista de
Ciencias, Literatura y Comercio” 01 abril 1898; # 1.
-“Ilustración Peruana”
Revista limeña # 140 (1912).
-“Lulú” Revista limeña
# 58 (1916).
-“Valdelomar: Signo”
de Luis Favio Xammar (1940).
-“Pido la Palabra” de
Alan García (2013).
-Revista “Pegaso”
Mexico # 19 (1917).
-“Los paseos
dominicales en Toluca durante el Porfiriato” Tesis de Ana Paula Escamilla
García UNAM 2001.
-Revista “El Gráfico”
Bogotá-Colombia # 327 (1917).
-“Historias
encadenadas de Buenos Aires” de Diego M. Zigiotto (2018).
-“Cuando la hipnosis cruzó
los Andes” de María José Correa y Mauro Vallejo. Chile 2019.
-Datos sueltos del
Internet.